¿Cuál es la diferencia entre ingreso pasivo e ingreso activo?

Si usted ha comenzado su camino en el mundo de las finanzas, acaba de poner un negocio o está buscando aprender más sobre cómo llevar de mejor manera su dinero, seguramente ya escuchó hablar sobre ingresos pasivos y activos. Si aún le resulta difícil comprender la diferencia, no sé preocupe; a continuación, haremos una revisión de ambos con la intención de desglosarlos a fin de que cada uno quede bien claro.

El ingreso activo

Se diferencia del pasivo porque son todas esas entradas de dinero que tenemos a cambio de una actividad. Es decir, es lo que obtengo a cambio de mi tiempo, talento, energía y esfuerzo. Dicho de otro modo; la gente que obtiene un ingreso activo, es la gente que trabaja por dinero. El dinero que proviene de un ingreso activo, está relacionado totalmente con mi esfuerzo directo.

De modo que, si usted sufre un accidente y por ello usted tiene una discapacidad temporal o permanente, dejará de percibir ese ingreso. El ingreso activo precisa de nuestra actividad para obtenerlo. Por otro lado, cuanto más tiempo trabajamos más ganamos. De modo que este ingreso va en medida de la inversión de nuestro tiempo. Entonces, podría ser que, cada vez que pagamos alguna cuenta con dinero proveniente de un ingreso activo, lo hacemos con un poco de nuestro tiempo de vida.

Pero uno no tiene por qué estar atado de por vida a los ingresos activos. Usted ya se ha comenzado a preguntar cuál es la diferencia entre estos dos ingresos. Entonces su curiosidad financiera lo ha puesto en el camino correcto. La meta de cualquier persona que piensa con inteligencia financiera es, precisamente, la libertad financiera. ¿De qué se trata? se preguntará usted. La libertad financiera es “tener la opción de dejar de trabajar y poder pagar los gastos de su estilo de vida”, eso es la libertad financiera. Y aquí es donde entran los ingresos pasivos.

El ingreso pasivo

Como ya estarán imaginando es, precisamente, la acción contraria al activo. ¿Qué quiere decir eso? El ingreso pasivo, habita en cualquier entrada de dinero que yo tenga sin que para ello sea necesaria mi presencia. Es decir, sin que para ello hubiera yo tenido que haber invertido tiempo, esfuerzo o algún talento. Una de las diferencias más marcadas entre el ingreso pasivo y el activo, es que acá ya no se trabaja por dinero, más bien, el dinero trabaja para nosotros. Fantástico ¿no?

Retomando la noción de libertad financiera, es preciso decir que no hay otro mejor camino para llegar a ella que el logro de los ingresos pasivos. Cualquiera podría imaginar que para tener un ingreso pasivo se debe tener mucho dinero o grandes empresas. La verdad es que sí, es mucho más fácil si usted ya cuenta con alguno de los anteriores, pero si no, no se preocupe, no son indispensables.

Ya vimos que el ingreso activo es todo ese dinero que recibimos por un trabajo realizado. Ya vimos también que el pasivo es el dinero trabajando para nosotros, o cualquier forma de ingreso que no precise de nuestra presencia para ganarlo. Pero ¿cómo se obtienen estos pasivos? la mejor manera, como ya lo habrá imaginado, es la inversión. En la medida en que usted invierta en activos, eso le llevará a generar ingresos pasivos.

Puede ser que usted esté pensando en un gran empresario o dueño de un taller o negocio que contrata gente que trabaje para él. Ese capital humano serían sus activos trabajando para que tenga un ingreso pasivo, sin que tenga que estar ahí, y ganaría dinero mientras almuerza o si decide quedarse en casa a dormir. Sin embargo, ser un empresario o dueño de negocio tiene sus retos; manejar personal es complicado, muchas veces se convierte en un ingreso activo más que pasivo, por lo que hay que considerar otras opciones de ingreso pasivo que verdaderamente liberen tiempo y esfuerzo de uno.

Una de las cosas que sí precisan los ingresos pasivos, es que usted estudie, que conozca muy bien el vehículo de inversión en el que piensa depositar su dinero. Existen muchas opciones, por ejemplo guardar su dinero en un banco bajo un interés compuesto, que es seguramente la opción que la mayoría conoce. Existen otras como Forex, la bolsa de valores, inmuebles para renta, inmuebles cuadrados, Uber o Cabify, máquinas vending, crowdfunding, franquicias o licensing y hasta renta de dinero (prestamos). Todos estos modos de invertir son activos que nos generan entradas en mayor o menor medida . Es importante mencionar que todos estos vehículos de inversión tienen su respectivo índice de riesgo. Sin embargo, le puedo asegurar que ninguna de las opciones de inversión que mencioné son tan riesgosas como dejar su futuro, su retiro, su jubilación en manos de las instituciones.

Confiamos demasiado en las instituciones. Pensamos que luego de una cantidad determinada de años, dejaremos de trabajar, y el estado nos brindará lo necesario para vivir tranquilos el resto de nuestra vida. Eso, desafortunadamente, es poco probable. Imagine dejar los días más vulnerables de su vida en manos de otro. Una locura, ¿no? Por eso, le repito que cualquier riesgo será menor comparado con el de dejar su destino en manos de otro.

De manera que el ingreso pasivo es su llave a la libertad financiera, a la tranquilidad de sus días de retiro y a días mejores y con menos esfuerzo. Invierta en activos que le generen pasivos, no necesita de mucho dinero para comenzar. Lo que sí hace falta, es que se decida a cambiar su vida, que no tenga miedo a perder dinero en el camino a esa libertad. Si usted quiere olvidarse de su salario ponga su dinero a trabajar para usted.