A medida que el mundo digital se vuelve cada vez más el mundo real, es importante estar al tanto de sus tendencias y cómo estas pueden afectar el panorama financiero. No es extraño escuchar de personas que están comprando “tierra” en el metaverso o que están apostando por NFTs.

Hace ya algunos años que escuchamos por primera vez sobre las criptomonedas, hoy siguen dando de qué hablar. ¿Qué es el cripto invierno y qué tendencias se esperan para el futuro de las criptomonedas? ¿Siguen siendo una buena inversión? Aquí te lo contamos todo.

Criptomonedas y petróleo: una apuesta económica como cualquiera

A finales del siglo XIX muchas personas apostaron por la industria petrolera y cavaron pozos de petróleo donde creyeron que podrían encontrarlo, fue similar a la fiebre del oro en el siglo XIX. Sin embargo, muchos de estos pozos fueron cavados en vano pues el primer auge petrolero no respondió como los inversionistas esperaban en ese momento.

Eso provocó el desánimo de otros tantos inversionistas que, después de esto, afirmaban que la economía o ningún negocio, e inversión, que se tratara de extracción de petróleo, podría sostenerse o si quiera tener buen puerto. Al pasar del tiempo, el futuro traicionó esos augurios y malas predicciones. La industria petrolera se recuperó, revitalizó y reescribió la economía y en gran parte el ritmo del capitalismo para siempre.

Igual que el petróleo, las criptomonedas han sido el objeto de innumerables discusiones entre expertos sobre si es o no, un recurso en el que se deba invertir o bien, si quiera que valga la pena invertir. Igual que el petróleo las criptomonedas han tenido un comienzo difícil. Por ejemplo: al comienzo de 2017 la criptomoneda valía unos mil dólares, un año después esa misma criptomoneda podía venderse en un promedio de dieciocho mil dólares. Desafortunadamente esa tendencia no se mantuvo, ya que poco tiempo después el precio de las cripto monedas cayó y se mantuvo a la baja por casi dos años. Lo que ocasionó el surgimiento de un concepto importante, el cripto invierno.

¿Qué es el cripto invierno?

Aunque las cripto monedas en la bolsa de valores tienen un comportamiento muy parecido al de las acciones, son realmente muy diferentes. A diferencia de las acciones, las criptomonedas son, como ya sabes, dinero digital, sin embargo, nadie las regula, nadie las emite y como consecuencia ningún banco las almacena. Eso explica la volatilidad de las cripto. 

Entonces el cripto invierno es ese momento en el que todo el dinero digital entra en una suerte de pausa o inactividad, es decir, una suerte de hibernación. El cripto invierno se desata o se genera como una consecuencia de las condiciones materiales que se viven en el entorno. Esto trae consigo implicaciones que no resultan positivas para todo el mundo.

En el primer cripto invierno en 2017 trajo consigo la caída de todas las monedas digitales y dejó sin fortuna a muchos de los que habían apostado a esta nueva divisa. Sin embargo, cuando el cripto invierno pasó y las monedas digitales se estabilizaron, una cripto moneda llegó a valer hasta sesentaiocho mil dólares.

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¿Qué sigue para las cripto monedas?

Una vez que hemos advertido de qué se trata el cripto invierno, es comprensible porque precisamente en este momento haya comenzado un segundo cripto invierno o cripto crash como otros lo han llamado. Consecuencia de la guerra en Rusia y las recientes amenazas de ataques nucleares por parte de Rusia; una pandemia que puso en recesión a todo el mundo, misiles norcoreanos sobre Japón y por si fuera poco una inflación económica en gran parte del mundo como nunca se había visto. Estos parecen ser motivos suficientes como para detonar un Cripto invierno.

De enero a septiembre del 2022 las criptomonedas han tenido una minusvalía, en promedio, de unos menos 65 %, lo que ocasionó como en su momento con el petróleo, que muchos abandonaran el barco de las divisas digitales. Sin embargo, otros dicen que el Cripto invierno no es del todo negativo. Irina Haivas socia de Atomico dice que este cripto crash resulta positivo pues ha terminado de desanimar a muchos más “turistas” en la industria cripto, que a su vez fortalece el terreno pues los inversionistas que se quedan son más fuertes y sólidos lo que hace que las divisas digitales tengan una mejor estructura financiera.

A su vez el Cripto invierno sirve como una suerte de evento depurador, pues para las empresas que no cuentan con proyectos económicos sólidos ni eficientes les es muy difícil continuar en el negocio de las criptomonedas. De manera que los buenos modelos de negocio prevalecen y no sólo eso, pues se hacen más fuertes.

Entonces el Cripto invierno es una suerte de purga para la industria cripto. Por otro lado, el panorama para las divisas digitales no es oscuro pues igual que el petróleo está librando obstáculos a fin de fortalecerse y volverse un valor sólido.