¿Qué es el nuevo Régimen de confianza?

Declarar impuestos ante el SAT, puede ser una tarea difícil de lograr. En primer lugar, porque no recibimos ninguna guía que nos oriente para saber hacerlo cuando alcanzamos la mayoría de edad y comenzamos a contribuir en el mundo laboral. En segundo, porque dentro de este sistema hay demasiados conceptos que pueden resultar confusos, sobre todo para aquellos que son principiantes.

Y ¿qué es el SAT?

En resumidas cuentas, el SAT, es el encargado de captar y administrar los recursos con los que todos los ciudadanos y empresas contribuimos al gasto público con nuestros ingresos. Si eres nuevo en este tema es probable que tengas muchas dudas, como: ¿por qué debo pagar impuestos cuando recibo ingresos? La respuesta es muy simple, la contribución que hacemos como personas físicas o morales, es destinada a la creación de obras públicas que nos benefician a todos. Sin embargo, han habido muchas personas que en su afán de evadir esta responsabilidad, se las han ingeniado para no apegarse a este organismo regulatorio. Según datos de la titular del SAT, Raquel Buenrostro, en los últimos cuatro años, aproximadamente 1.5 billones de pesos fueron evadidos, esta cantidad representa la tercera parte del presupuesto federal. Esto significa que más de 50% de la población no paga impuestos.

Este hecho ha consternado al SAT, por lo que en fechas recientes se presentó una propuesta nombrada “Régimen Simplificado de Confianza”, que forma parte del Paquete Económico para el 2022, cuyos objetivos son: facilitar el pago de impuestos, disminuir la tarifa de éstos y lograr que más contribuyentes se apeguen al régimen con estas modificaciones.

Ahora bien, ¿en qué consiste esta nueva propuesta?

Se propone cambiar el antiguo régimen fiscal RIF (Régimen de Reincorporación Fiscal), que fue diseñado para los nuevos contribuyentes. Este régimen aumentaba cada año un 10% los impuestos a pagar de los contribuyentes, hasta llegar a la cantidad normal estipulada. Aunque el RIF es un buen régimen, lo cierto es que esta nueva propuesta, puede ser muy provechosa no sólo para nosotros, los contribuyentes, sino para aumentar los recursos del SAT.

Una de las diferencias que tiene este “Nuevo Régimen de Confianza”, en comparación con el RIF, es que el pago de los impuestos se calculará tomando como base sólo los ingresos netos, lo que significa que es probable que las deducciones de impuestos sean eliminadas. También, se propone en este régimen, la disminución de la tasa del ISR y la simplificación de la contribución tributaria. La cantidad de impuestos que se deberá pagar, se calculará a partir de los ingresos brutos y el porcentaje oscilará sólo entre el 1% y el 2.5%. Otra de las ventajas de este nuevo régimen apunta al cálculo automático de los impuestos gracias a un algoritmo que programa las declaraciones.

Si bien estos cambios no han entrado en vigor aún, son muchas las expectativas que se tienen sobre estas nuevas modificaciones. No obstante, si bien es cierto que hay algunas personas que están de acuerdo con algunos de estos cambios y también hay quienes desconfían de esta nueva propuesta. Lo que es cierto es que de ser aprobado este nuevo régimen, es necesario saber que, si actualmente alguien se encuentra en el Régimen de Incorporación Fiscal, forzosamente deberá optar o bien por formar parte del régimen de persona física con actividad empresarial o tendrá que elegir sumarse al de confianza.

Teniendo esta información, puedes comenzar a realizar cálculos para saber cuál de estas opciones es la que más te conviene. Quienes decidan cambiar al nuevo régimen deberán cumplir los siguientes requisitos: deberán formar parte del RIF, arrendamiento, persona física con actividad empresarial, sector primario o freelancers, siempre que sus ingresos no rebasen los 3.5 millones anuales.

Dejando por un momento de lado las especulaciones negativas, no podemos negar que la propuesta del “Nuevo Régimen de Confianza” puede resultar benéfica, especialmente para aquellos micronegocios que no tendrán que pagar impuestos elevados. Además de que, como estrategia, ésta ayudará a que aquellas personas que no están en orden con sus impuestos, en lo sucesivo, se animen a realizar el pago que les corresponde; y en ese sentido será mucho más equitativo llevar el gasto público.

En su oportunidad, al ser cuestionados sobre estos cambios, los altos funcionarios del SAT han subrayado los beneficios colectivos que buscan estas nuevas propuestas. Por ejemplo, uno de los aspectos que resaltó en su momento la titular del SAT, Raquel Buenrostro, es que desde hace algunos meses se está trabajando en hacer posibles modificaciones al sistema para que éste sea más fácil de entender, y que gracias a la accesibilidad de la plataforma digital, el sistema mismo se convierta en una herramienta más amable para la interacción de todos los contribuyentes^[1].

^[1] Cfr. Zenyasen Flores, “Anticipa Buenrostro reforma fiscal para septiembre” en: https://www.elfinanciero.com.mx/economia/2021/06/14/reforma-fiscal-se-presentara-en-septiembre-no-tocara-a-asalariados-sat/ (recuperado 12 de octubre de 2021).